Mi experiencia Yako es seguramente la mejor y más increíble que he tenido nunca, y es algo que vivo cada día como parte de mi trabajo. Llevo años impartiendo cursos de Yako y en cada edición he crecido un poco más.
Como Elite, he tenido la suerte de compartir la experiencia de rodar junto a nuestros talentosos coreógrafos. Tanto a nivel profesional como personal, se han forjado lazos y se ha establecido un ambiente familiar dentro del equipo. Como entrenadores, buscamos constantemente formas de aprender, de ser mejores profesores, de ser mejores personas. La experiencia del Yako me aporta todas estas cualidades. Nos da confianza y nos permite retarnos a nosotros mismos.
Es imposible decir qué curso Yako prefiero, ¡porque me encantan TODOS!
Y espero formar parte de este loco equipo Yako durante unos cuantos años más.
